¿Creen en milagros?

Les contaré la anécdota del día de hoy.

¿Nunca han sentido que esa persona, llamemosle: La persona especial, no es la indicada?

Hoy, me debatía entre luchar por alguien a quien yo quiero mucho, y aprecio bastante, o dejarla ir con el viento.
Necesitaba oír un consejo, o algo parecido.
Alguien que me dijera que podía hacer, dado que en estos asuntos soy como una nueva alumna.
Bueno, me desvíe un poquito.
Ocurre, que tuve un problema con esa persona.
Fue mi culpa, he de aceptar, pero, me sentía mal.
El hecho de no saber a quién acudir porque inmediatamente todos te ven como el único culpable es un poco fastidioso.

No conozco a una persona totalmente empatica, y eso no me agrada mucho.
Mi casa tiene unas escaleras de caracol para llegar al techo, y cuando me siento deprimida suelo subir y quedarme en el ultimo peldaño para pensar las cosas, y sobretodo, calmarme.
Esa sensación en el pecho de no saber que hacer, de querer voltear al mundo y salir en el último vuelo a Saturno es horrible, me desespera. (Aquí entre nos, no soy n a d a paciente).
Me quedé viendo el cielo, y levante la vista preguntando:
¿De verdad vale la pena? ¿Crees que deba marcar y decirle todo lo que siento? Con un solo pájaro que vuele sobre mi cabeza se que debo hacerlo.

No pasó nada.
De pronto, un pájarito se acerco al techo, y huyo como si hubiese visto al mismiso demonio.
Suspiré y alce de nueva vuelta la mirada al cielo.
"Juro, que con solo un pájaro que vuele sobre mi o que pase a mi lado me conformo."

Otra vez, nada.
Me quedé viendo el cielo hasta que muchos pájaros volaron sobre mi. No al lado, no al costado.
Sobre mi.
Lloré de alegria, no sabría explicar el por qué.
Creía que alguien me escucho, alguien me contesto.
Marqué, y deje fluir todo aquello.

¿Alguien me habrá escuchado? Y otras preguntas que nunca tendrán respuesta.