¿Cómo no te voy a querer?

Me levanto, no lo pienso mucho,
voy al espejo y le doy mi mejor sonrisa.

Es hora de bañarme, es hora de arreglarme,
porque la única razón para peinarme,
eres tu.

Me lavo los dientes, desayuno lo que encuentro,
corro por la casa en calcetas, resbalándome para apresurarme,
para llegar temprano, encontrarle,
porque la única razón para llegar temprano,
eres tu.

Entre mis canciones, antes de llegar,
siempre reproduzco una antes de bajarme del auto.
No es coincidencia que Green Eyes sea de las mas reproducidas de mi celular.

Nadie lo ha notado dentro de está casa.
Nadie sabe lo mucho que corro por las mañanas.
Nadie se ha dado cuenta que regreso molesta, feliz, incomoda, feliz.
Ya no son las mismas miradas,
ahora tienen algo más.
Son chispas, tu me das la chispa, 
con esa sonrisa que me dice que quiere hablarme de amor todos los días.

Te noto entre la gente,
te noto entre las hojas de mis libretas.
Te noto de lejos, cuando jugamos a esquivar nuestras miradas,
y como siempre, he de perder.

Lo noto en mis vasos con agua cuando escribo para ti.
Noto muchas cosas que suelen pasar desapercibidas,
eres otra razón más para estar feliz.

¿Cómo no te voy a querer?
¿Cómo puedo mentirte?
Mis ojos me delatan.
Mi sonrisa me delata.
Mis manos sudorosas me delatan.

Me pones nerviosa, me sonrojas.
Me tienes como un loco mareado jugando en la cuerda floja.
Y siento que si caigo, me puedo levantar, porque tu eres la red que me puede atrapar.

Apareces en mis sueños, como el doble de acción que no sabe ni en que parte del libreto entra a escena.
Estas en la audiencia, estás tan dentro de tu papel,
haciéndola del personaje principal que no le teme a la muerte;
que me desafía a quererlo por todo lo que pueda quererle.

¿Por qué tienes que brillar tanto entre tanta gente?
¿Cómo puedes gustarme tanto?

No tengo ganas de escribir cómics contigo, tengo el leve presentimiento que serás mi primer novela.

Me faltan muchas iniciales por escribir entre mis piernas, junto a una S.

Tienes todo lo que no quiero.

¿Cómo no te voy a querer?
Si eres tu.
Y tu, tu eres mi razón para peinarme.
Para levantarme.
Para acostarme.
Para tirarme, para soñarte, para escribir.

¿Cómo no te voy a querer, si me haces feliz?
¿Cómo no te voy a querer, si eres tu?









Comentarios

Entradas populares