Y yo que no me quería enamorar.

Sé que te escapaste.
Que saliste de algún lugar bien lejano para quedarte cerca de mi, para acercarte, sabiendo que mis manos son heladas, todo el tiempo...
Yo sé el miedo que te dará ver el millón de cicatrices. 
Yo sé que te dolerá cuando no pueda decirte te quiero porque me da miedo.
Yo sé que no es fácil recibir parte de los daños.
Y yo que te quiero cuidar...

Yo sé que me vas a extrañar cuando me ponga ausente.
Yo sé que te va a enojar cuando me ponga en mi plan autista.
Yo sé que vas a querer irte.
Y yo que quiero que te quedes...

Entonces me suelto un poco cuando dices hola, me suelto otro poco cuando me dices bonita, y me suelto demasiado cuando me dices te quiero.
Ya no sé si todo a lo que le temo va a seguir surtiendo efecto cuando esté entre tus brazos.
Ya no sé si estoy ansiosa.
Ya no sé que es empezar el día sin tus buenos días.
Ya no sé que es no quererte.
Y yo que no quiero que me lastimes.

Pero te siento, juntito a mis manos heladas, cerquita de mis cicatrices, lejitos de mi parte negativa, y bien quedito entre mis pensamientos.

Tengo miedo de volver al abismo.
Tengo miedo de que te me vayas en un parpadeo... Yo que quiero hacer las cosas bien, yo que te quiero.
Ah, te quiero.

Ojalá no te me vayas, y si te vas, ojalá que no me quede el recuerdo, que otra cicatriz más y me rompo.

Tú con tus manos calientitas, yo con el miedo del fracaso.
Tú con tu calma, y yo que todo lo quiero deprisa.
Tú con tu karma, yo con mi mala suerte.
Tú que te escapas, yo que me escondo.
Tú que me quieres, yo que tengo miedo.
Tú que tienes miedo, yo que te quiero.

Tú con tus ganas de estar conmigo, y yo con mis ganas de quedarme a tu lado.

Y yo que no me quería enamorar... 






Comentarios

Entradas populares