Julio en cuatro días.

Siempre ando perdida en el pasado. 
Siempre recordando caras que ya no veo,
voces que ya no escucho,
miradas que ya no atrapo.
Y es que para mi dicha y también desdicha,
me acuerdo de cada partícula que conforma un recuerdo.

Siempre ando conectando el ahora con los "ya fue";
conectando piezas que en el momento no encajaron. 
Siempre regresando,
siempre en el pasado.

Ando entre memorias donde existes todavía.
Conectando tus palabras en oraciones, para recordar como vibraban mis oídos con tu voz.
Ando recordando como me pintabas la vida de un color que no sé sacar con la acuarela.
Ando pensando en como si sería si hubiese tomado tus manos con más fuerza,
o si hubiese sido más atenta.
Regresaría a julio en cuatro días,
y no te dejaría irte a dormir sin decirme que te hacía falta.
No importaría volver,
aún sabiendo que te irás,
te aprovecharía aún más.
Yo sé que me frustraría, yo sé que me costaría,
pero por verte otra vez,
valdría la pena.

Te cuento que te recuerdo porque, ¿qué más tengo?,
sólo soy una bolsa de memorias.
Llenándome la mente con cosas ajenas a mí,
para no pensarte, para que no me escuezan las manos por tocarte;
tocar tu cabello castaño, casi negro,
pasar mis dedos entre los mechones y aspirar tu aroma, 
mientras te digo que siempre me habías hecho falta.
Luego tocaría el puente de tu nariz con la yema del dedo indice,
mientras te digo que te sobran las cosas que quiero en alguien.
Tan a mi medida que huiste antes que yo lo hiciera,
porque ambos sabíamos que huiríamos,
pero como siempre te digo,
contigo sentí la necesidad de no huir más.

Ando recordando como tus besos me alejaban de todo.
Recuerdo la luz en la recamara y tu risa.
¿Cómo mierda olvidarme de tu risa?
Tu risa que me provocaba sonreír,
que me provocaba querer besarte hasta que no tuviésemos labios.
¿Cómo podría olvidarte, si te tengo aunque no estés aquí?
¿cómo podría olvidarte, si revivo julio en cuatro días?
Mi boca no paraba de hablar de ti,
mis manos no dejaban de temblar.
Yo no dejaba de temblar.

Siempre me la pasó en el pasado,
recordando caras que ya no veo,
lugares a donde ya no voy,
personas que ya no están, o que están lejos,
y entre todos mis recuerdos,
como si brillaras, como si me atraparás,
puedo revivirte,
en julio en cuatro días. 


Comentarios

Entradas populares