échale huevos

conforme crecía
y conforme abría mas los ojos
me di cuenta que
todos
absolutamente todos
tenemos que probar el corazón roto
aunque sea una sola vez.

y el corazón roto puede venir
de tus hermanos
de tus padres
de tus amigos
de tu pareja
de una enfermedad
de la familia
del mundo
y de sí mismo.

pero, el corazón roto sólo significa dos cosas:
mirá cuánto amaste
mirá cuánto confiaste.

y eso está muy bien.
te felicito por hacerlo,
porque hay mucho valor detrás de eso.

hoy me la pasé en cama
sintiendo como mis tripas se retorcían
y tuve mucho tiempo para pensar
qué hay curas muy bonitas
esparcidas en el mundo
para sanar el corazón roto
o enfermedades, en sí.
hay pastillas
hay besos
hay mamás
hay papás
hay amigos y amigas
hay personas que nos quieren
hay personas que nos escuchan.
también hay árboles
hay amores platónicos
hay comida
hay agua
hay aire
y mirá
cuantas cosas puedes ver
si ves con el alma.

hoy pensé en cómo un corazón roto
se puede reparar
si uno le pone ganas;
si uno aprende a enmendarse
a sí mismo.

vos sos único en el mundo,
o única
da igual el sexo
tienes mil razones para echarle huevos
aunque no parezca
y si vos te quieres rendir
sólo te puedo decir
que en una barca
a veces no hay que remar
hay que dejar que la corriente te lleve,
pero ojo,
que cuando uno se deja ir mucho,
la orilla parece muy lejana,
pero, si vos remás un poquito,
eventualmente
la orilla
estará cerca.

échale huevos
a todo lo que hagas
y si vos te llegás a romper el corazón
sólo puedo decir
qué hiciste dos cosas bien.